lunes, 7 de diciembre de 2009

DANIEL Y EL REINO VENIDERO DE DIOS

El tema del reino de Dios ocupa un lugar importante en las profecías de Daniel, son profecías dadas para un contexto histórico preciso pero al igual que en las predicciones del resto de los profetas también se refieren a un futuro muy distante ya que en el Nuevo Testamento los pasajes análogos muestran la relación en su cumplimiento en conexión a la iglesia y al reino de Dios. El comienzo y explicación de estas profecías lo podemos ubicar en Dan.2:37 “Tú, oh rey, eres rey de reyes; porque el Dios del cielo te ha dado reino, poder, fuerza y majestad” el mensaje divino es claro: Dios como Soberano de toda la creación decide conceder un poder inmenso a Nabucodonosor, en él se representan todos los reinos con sus futuros reyes, esta visión nos permite ver un emblema o símbolo del poder humano en todo su esplendor y decadencia en los sucesivos imperios y finalmente sus fracasos por perseguir fines egoístas y no cumplir la voluntad de Dios.
Las profecías e imágenes de Daniel apuntan escatológicamente hacia Jesús el Cristo como el Hijo del hombre del cual sería el reino eterno de Dios y esto inevitablemente involucra a la iglesia de nuestros días.
¿Podemos afirmar que las profecías de Daniel tienen cumplimiento en: 1- Cristo, 2- la iglesia y 3- en el reino eterno de Dios?
En Dan.2:31-45 la imagen representa los cuatro reinados que se sucederían: el de Nabucodonosor, el de los medos, el de los persas, el de Alejandro de Macedonia y el imperio romano donde se desarrolla el evento Cristo. El reino que profetiza Daniel 2:44 es de carácter eterno, descrito como indestructible, este reino desintegraría, finalizaría o absorbería todos los demás reinos humanos, veamos la profecía: “Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, … desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre” Jesús el Cristo nació en el reino Romano, el cuarto imperio (Lc.2:1-7) es irrefutable que Daniel está profetizando sobre el reino de Cristo, el cual no tiene límites porque se extiende más allá del fin de todos los tiempos, y esto lo confirma las palabras del mismo Jesús cuando empieza a predicar y enseñar sobre el reino de Dios.
Veamos los pasajes análogos en el Nuevo Testamento (Mr.1:15) “El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio” (Mr.9:1) “hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte hasta que hayan visto el reino de Dios venido con poder” El apóstol Pablo nos habla del Señorío de Cristo y de su reino donde los santos han sido transpuestos (Col.1:12-13) “con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo” El reino de su “amado Hijo” es una inequívoca una referencia tanto al reino de Dios en los cielos, como al reino de Cristo que es su iglesia aquí en la tierra.
En Dan.2:34 la piedra que desmenuzó la imagen y se convirtió en un monte es Jesucristo. - Pasaje análogo NT: (Mt.21:43-44) “el reino de Dios será quitado de vosotros,... Y el que cayere sobre esta piedra será quebrantado” la piedra representa a Cristo y su reino sobre los reinos de este mundo -Pasajes análogos NT: (1 Co.15:24) “Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia” (Hch.4:11-12) “Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo.” (1 P.2.4-7) “Acercándoos a él, piedra viva, …para Dios escogida…pongo en Sion la principal piedra del ángulo” La piedra creció y llegó a ser un monte por la predicación del evangelio en todo el mundo- Pasajes análogos NT: (Mt.13:31-32) “El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo; el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas…” (Mt 28.18-19) “Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones”
Daniel 7:13-14 “con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días” Daniel describe y profetiza sobre el Hijo de Dios. Jesús es el “Hijo de hombre” quien tiene el dominio en el reino de Dios, además de señalar la humanidad de Jesús es un título mesiánico, “le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, … y su reino uno que no será destruido”- Pasajes análogos NT: “es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado” (Jn.3.14) “le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre” (Jn.5.27) “veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra del poder de Dios, y viniendo en las nubes del cielo (Mt 26.64) El escritor de Hebreos declara que reino e iglesia son la misma cosa: (Heb.12:28) “Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible” Cristo volverá para trasladar a la iglesia a su reino eterno 1 Tes.4:15-17; 2 Ped.3:10-13; 1 Cor.15:50-55.